¿En que situación está la mayoría social?
La tremenda paradoja, la inquietante contradicción consiste en comparar la gravedad de la situación y la ausencia de sujeto social capaz de abordarla y superarla. Se necesita un soporte cívico democrático, de valores alternativos, firme, con voluntad de acometer el proceso de saneamiento económico, político y ético que la realidad demanda; y sin embargo esa fuerza no existe por ahora; existe en potencia pero no en acto.
La mayoría no tiene más homogeneidad que su condición de dominada ayer, hoy y si no lo remediamos, mañana también. Pero apenas hay algo más que la haga consciente de que es mayoría y puede ejercerla. En ella hay colectivos y personas que luchan como pueden contra esta situación; y lo hacen desde distintos supuestos, compromisos y proyectos de futuro. En esta mayoría viven multitud de personas que limitan su participación cívica a cada acontecimiento electoral y poco más allá. Pero además hay un número amplio de indiferentes a cualquier proyecto de acción cívica y que con resignación consciente o tácita asumen como inevitable los que les ocurre; No faltan tampoco quienes asumen con conciencia de culpa el discurso del poder económico y político que generalizando plantea que “hemos vivido por encima de nuestras posibilidades”. Es la aceptación del discurso del dominante por parte del dominado. Es la represión perfecta: la víctima hace suyos el discurso y los valores del victimario.
En esta situación de resignación cultivada por el poder, de carencia de futuro y de anomia generalizada me dirijo a la mayoría, en mi exclusivo nombre, desde mi libertad y desde la convicción de que, si ahora no se lucha, nuestros hijos y nietos no tendrán futuro, ni país, ni tampoco se tendrán a ellos mismos. En consecuencia, hago una Convocatoria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Y ud. qué opina